El
Museo Municipal Punta Hermengo de Miramar, dio a conocer el hallazgo de una
buena cantidad de fósiles, principalmente de los últimos 4 millones de años,
mostrando la riqueza y variedad de especímenes, como restos vegetales,
insectos, peces, aves, anfibios, mamíferos gigantes extinguidos y hasta huellas
fosilizadas.
El
equipo local de trabajo está conformado por Daniel Boh y Mariano Magnussen,
ambos de la institución local, contando con la colaboración periódica de
Francisco Di Cianni, del Museo Argentino de Ciencias Naturales de Buenos Aires,
además del asesoramiento de investigadores del de la Fundación Azara y Conicet,
que se encuentran estudiando varios hallazgos realizados con anterioridad en
esta localidad.
Los restos
fósiles recuperados, pertenecen a distintos organismos, los cuales ayudan a
entender a los científicos como eran esos ambientes primitivos y su ecosistema.
Las excavaciones para recuperar estos especímenes, variaron desde unas horas a
varios días de trabajo, dependiendo del tamaño del fósil, dureza del sedimento
y ubicación, más otros tantos días de preparación en el laboratorio.
Posteriormente viene el estudio y clasificación para ser incorporados a la
colección del museo local, como lo establece la ley 25743 que protege los
sitios paleontológicos y arqueológicos de la República de Argentina.
Entre la
docena de materiales recuperados, corresponden al Plioceno, Pleistoceno y
Holoceno, es decir, entre 4 millones de años a 10 mil años antes del presente.
Fueron realizados en los acantilados ubicados en la zona norte, Golf Club,
Playa Náutico, Muelle de pescadores, Baliza
y Bosque del Vivero.
El
material hallado corresponde a muestras de rizolitos (moldes vegetales). Un nido con el molde de una
larva, perteneciente a un escarabajo. Restos de un cráneo de Ceratorphys, un anuro (escuerzo) depredador.
Varias vertebras de al menos cuatro individuos
de peces, poco frecuentes en el registro fósil bonaerense. Restos de carnívoros
marsupiales dentro de una paleocueva, aún sin dentificar completamente. Cráneos
y restos varios de un Paedotherium,
un pequeño notoungulado (ungulado del
sur) extinto. Restos del genero Nothura,
una extraña ave Tinamidae, conocidas
actualmente como Inambúes o Perdices. Restos de coraza y otras partes del
esqueleto de una especie de Gliptodonte, un armadillo gigante. Una seguidilla
de huellas fosilizadas atribuidas a Camélidos y Cervidos, que dejaron sus
rastros en una antigua laguna. Restos de dos cráneos de un perezoso gigante
llamado Scelidotherium, que en vida
tenía unos tres metros de largo. Restos
varios de Lestodonte, otro perezoso gigante de unos cuatro metros de alto. Por último,
en sedimentos más modernos, se recuperaron partes de un esqueleto de Lama
guanicoe, un representante de los camélidos sudamericanos.
Un
pequeño museo que apunta a lo grande.
El
Museo de Miramar ha quedado muy pequeño para la cantidad de especímenes que se suman
constantemente en las distintas áreas, ya sea por prospecciones propias o
aquellas donaciones de los vecinos. “Por suerte, el Municipio y la Fundación
Azara se encuentran encaminados en el anteproyecto de un nuevo y moderno
edificio para albergar la exhibición de
ciencias naturales y sus colecciones, teniendo en cuenta que en la actualidad, solo se expone una pequeña parte de la
colección total”- argumento Daniel Boh, titular de la institución.
Mariano
Magnussen del museo local, por su lado comento que; “tenemos algunos fósiles
depositados desde hace más de diez años, aun sin procesar y estudiar por la
falta de espacio y por la cantidad de
material que se suma al museo, entre
ellos, un enorme gliptodonte del tamaño de un automóvil, acompañado con el
sedimento y envuelto en yeso que aún no sabemos el contenido exacto en su
interior, más allá de la coraza visible”, detallo a los medios.
Los sorprendentes hallazgos y la calidad institucional que
ha mostrado el Museo Punta Hermengo de Miramar en los últimos años, permitirá que se concrete el nuevo edificio,
además, la ciudad fue seleccionada para
que en el mes de abril del próximo año, sea la sede del
Jornadas Paleontológicas y Arqueológicas de la provincia de Buenos
Aires, donde asistirán investigadores y técnicos regionales, nacionales y
extranjeros.