14 de febrero de 2019

Hace 25 años el Museo de Miramar rescataba restos de una Ballena Fin.



En el verano de 1994, turistas y vecinos de nuestra ciudad, presenciaron un hecho inusual en nuestra costa. Un gigantesco Cetáceo que días antes fuera visto vivo en las proximidades de la localidad balnearia de Mar del Sud, flotaba en las orillas marítimas del Vivero Dunicola Florentino Ameghino de nuestra ciudad. Se trataba de un ejemplar juvenil de Ballena Fin (Balaenoptera physalus) que se encuentra en vías de extinción.
Esta importante criatura, que puede alcanzar los 30 metros de largo y 130 toneladas de peso. Ardua fue la tarea de tratar de rescatar algunos restos para ser expuestos en el Museo Municipal Punta Hermengo, puesto que se trataba de un hermoso animal de 14 metros de largo y unos 40.000 kilos.
Debido a las dificultades del terreno, las mareas y la tremenda inconciencia de los depredadores de costumbre, que dieron cuenta de gran cantidad de vértebras y otras partes, pudimos rescatar solamente el cráneo, que de todas formas es una pieza importante y que costo de nueve días de trabajo para descarnar y luego trasportar al lugar de preparación.
Destacamos que la ballena azul exhibida en el Museo de La Plata (1895) y otra conservada en el Museo de Ciencias Naturales “Bernardino Rivadavia” (1925) provienen de sendos varamientos en nuestras costas
En esa oportunidad participaron el señor Tony, dueño de la grúa, fotógrafo Mario Boh y a nuestros colaboradores habituales, Mariano Magnussen Saffer (hoy en día integrante del Museo de Miramar) Adrián Giacchino (por entonces colaborador del Museo de Miramar y en la actualidad es Presidente de la Fundación Azara), Nicolás Ippolito y Daniel Boh (también del Museo de Miramar), que permitieron que esta tarea terminara exitosamente.
Para entonces y como anécdota, el trabajo principal estaba a cargo de tres personas, que solo contaban con dos bicicletas para atravesar el bosque del vivero  y la zona de médanos costeros. Más allá de unas cuantas semanas de tanto trabajo bajo el sol, pudimos ingresar al patrimonio del Museo de Miramar estos interesantes restos.
El Museo Municipal Punta Hernengo de Miramar, tiene además una colección muy completa de mamíferos marinos, que comenzó con este cráneo de Ballena Fin, entre ellos, un esqueleto completo de 12 metros de Ballena Franca (Eubalaena australis), un esqueleto completo de Ballena Minke (Balaenoptera acutorostrata)  de unos 4 metros, un esqueleto completo de Ballena Sei (Balaenoptera borealis)  de 14 metros, una Ballena Azul (Balaenoptera musculus) de 22 metros, un cráneo completo de cachalote (Physeter macrocephalus) de unos 4 metros, esqueletos de delfines del plata (Pontoporia blainvillei), Cráneo de Ballena Rostrada o Delfín Picudo de Cuvier (Ziphius cavirostris),  y esqueleto de Tonina (Tursiops gephyreus) de tres metros, además de lobos (Arctophoca australis y Otaria flavescens), focas (Leptonychotes weddellii) y elefantes marinos (Mirounga leonina) y seguimos por más.